martes, 29 de noviembre de 2016

Otra experiencia más...

Ya sé que tu no sabes. Que no conocías mis razones. Que no entendías mi interés, ni mi constancia. Que no te imaginabas como ni cuanto dolía. Pero estaba ahí, a pesar de todo y de tanto.
Era así... apasionada, cariñosa, la fiel compañera de quien se embarcase en mi vida.. y tu lo hiciste; embarcarme en la tuya. Yo conforme me enamoré. Me adapté a tus formas, tus manías... a tus enfados sin motivo, a tu malestar constante, a tu control incesante, a tus manipulaciones compulsivas... y con mis 17 años ¿ qué iba a hacer yo ?. No podía saber reaccionar a eso.
Mi adaptación cada vez iba a más, terminé por acostumbrarme a tus formas, a tus gritos... a tus humillaciones y tus insultos, a que intentaras apartarme de todo lo que me importa, a decirme "disimuladamente" que podía o no podía hacer, con quien podía o no podía hablar, a que no me dejaras hacer tranquila lo que me gusta, a que me hicieras sentir mal si no quería acostarme contigo... volviendo aquí a las humillaciones.
Seguro que ni te imaginabas cuanto dolía. Sentir que no significas nada para quien es tu prioridad.
Yo daba lo que fuera por ti. Peleaba con quienes más me querían. Dejaba atrás todo para darte a ti el primer lugar en todos los aspectos de mi vida. Derrochaba amor por las esquinas, bebía los vientos, sentía que me moría si no estabas a mi lado... que mi vida no era vida ya sin ti. Separarme de ti cinco minutos me partía el alma. Era algo intenso, demasiado. Te quería más a ti que a mi misma. Mi mundo giraba entorno a ti, mi mundo eras tu. Tus familia, tus amigos, tus costumbres, tus gustos... yo ya no contaba para nada.
Y de repente un día me acordé de lo que me decías cuando nos conocimos; que te encantaba mi sonrisa, que tenía un pelo precioso, que vestía súper bien, que era la niña más bonita del mundo, que era envidiable la capacidad que tenía de relacionarme con todo el mundo, que siempre hablaba de algo... y mi pregunta es: y ahora ¿ qué te gustaba de mi ?. Si ya no sonreía, si siempre llevaba el pelo recogido porque ¿ para qué me iba a poner guapa ?, si cogía lo primero que pillaba del armario, si ya tenía los ojos apagados de tanto llorar, si ya no podía hablar con nadie, si ya no me apetecía hablar nunca... me convertí en el antónimo de lo que te gustaba.
Me menospreciaste, me anulaste, te quedaste con mi alma, me absolviste la vida, me quemaste... me dejaste echa una mierda.
Pero ¿ sabes qué ?, ahora soy feliz , ahora sé que puedo ser lo que yo quiera, que valgo muchísimo, que voy a vivir mi vida porque solo tengo una, que voy a luchar por mi, y quien quiera estar a mi lado y quererme bien genial, quien no que no se moleste ni en preguntar.
Te regalé lo más valioso que puede tener cualquier persona, el único regalo que te demuestra que alguien te quiere de verdad; mi tiempo. Ese regalo es el que se hace y no se recupera jamás, y yo te lo di a ti.
Te deseo que te vaya bien, pero para mi, me deseo que me vaya mejor.

lunes, 28 de noviembre de 2016

Cortometraje violencia de género



¿¿Qué os parece este video??

UNA GRAN PARTE DE MI

Una gran parte de mi.


Todo comenzó el 22 de octubre de 2012, cuándo yo todavía era niña, cuando yo todavía creía en las hadas, cuándo todavía era pronto para preocuparme por las cosas, pronto para pensar en mi futuro, pronto para alinear mi vida.

Todo comenzó cuando lo conocí a él, el era mi amigo, después era mi mejor amigo. Pasábamos tiempo juntos, salíamos juntos, íbamos a clase juntos, en los recreos estábamos juntos. Dicen que el roce hace el cariño, y yo empeze a encapricharme con él.

El me decía que lo dejaba todo, que no le importaba nada ni nadie, que estaba enamorado de mí, hay un refrán que dice: «Las palabras se las lleva el viento», pero en aquellos tiempos yo si que creía y confiaba en él.

Me enamoré de él, aún era inocente, y a pesar de los consejos, que yo recibía cada día, no veía en dónde estaba metida.

El me quería, o eso decía el, me daba besos, me escribía largos textos, me decía que nunca me haría daño, y yo tonta que lo creí, que creí sus palabras, y creí que realmente que el era el hombre de mi vida, claro que sí, el me lo repetía cada día: '' Yo soy el hombre de tu vida y nadie más lo sera jamás''

Si escribo esto, es por que realmente me veo capaz de contar que yo misma, y incredula fui victima de violencia de género. Nadie sabe como empieza, porque nunca nadie se lo espera, pero todo son detalles.

No me gusta esa falda, o no me gusta que hables con ese chico, no me gusta que te pintes para salir, o no me gusta que bailes en una discoteca. Simples detalles, que tú, aceptas, dejas de ponerte faldas, dejas de hablar con ese chico que siempre fue tu amigo, dejas de pintarte y dejas de ir a las discotecas con tus amigas.

Después vienen las discusiones, no quiero que vayas a este sitio si no es conmigo, no quiero que vuelvas a salir con tus amigas, ellas son solteras, no quiero que saludes a ningún otro chico, no quiero verte con un pantalón corto.

Crees que si le haces caso, el jamás te dejara, el te dice que nadie va a quererte como él, que nadie va a perdonarte nada como él, y lo crees, crees que es cierto, que tu estás destinada a estar con él.

Llega ese momento en el que estas en una botella, aislada del mundo, ese momento en el que no quieres escuchar a nadie solo quieres escucharlo a él y eso fue lo que a mi me paso.

Solo quería oir sus buenas noches, y sus buenos días, me daba miedo salir a comprar y que alguien me saludara, fuese a dónde fuese siempre iba con la cabeza agachada, no quería ver la realidad a pesar de que sabía lo que estaba pasando.

Las discusiones cada vez iban a más, el me hacia creer que yo tenía la culpa de todo lo que me pasaba, que yo era muy suelta por saludar a mis amigos, que yo era una ''Golfa'', y para este tipo de cosas tengo que usar este tipo de palabras, porque es la realidad, la realidad que vivimos y que no nos damos cuenta de que esta ahí, de que nos esta destrozando un poco más cada día.

Después las discusiones eran aún mas fuertes, el me amenazaba, me decía que si lo dejaba iba a venir, me iba a matar a mi y a todo el que se me acercase, hasta que ya no puedes mas, hasta que ya cruzas el limite y ya no puedes salir de ese pozo que tu misma has cabado.

Me encontré sola, ¿Que podía hacer?, lo dejé.

El me entrego una Luna de Miel, me prometió tantas cosas que yo creí una vez detrás de otra, hasta que la cosa fue a peor, y todos tuvieron que intervenir.
No me valoraba a mi misma, no me quería a mi misma, me consideraba por debajo de el, no hay peor maltrato que el psicólogico, ¿Cuándo mi vida cambió tanto?

A día de hoy, me he dado cuenta de tantas cosas, los celos, no son buenos, el decía que tenía celos porque me quería, pero eso nunca es cierto. Los celos son una enfermedad, todo eso es una enfermedad, una relación toxica que poco a poco acaba contigo sin que te des cuenta.

Jamás lo olvidare, pero ahora soy fuerte, soy mujer y soy valiente, y estoy orgullosa de ello. Ahora se quién si, quién no y quién nunca